Durante la pandemia en un autocinema de Tijuana, frente al parque Morelos.

El concierto del grupo La Cruz de Chris Pedraza, un locutor de una estación de radio local, se realizó en un inmueble del bulevar Insurgentes, al este de esta ciudad fronteriza y carecía de permisos municipales por la contingencia sanitaria del Covid-19.

El público se concentró en vehículos. Al terminar cada canción, tocaban el claxon hasta que llegaron los inspectores municipales y desalojaron el lugar.

Hace unos días, el alcalde, Arturo González Cruz, instruyó que se reforzara la vigilancia para que se respeten las medidas sanitarias y evitar el riesgo de contagios entre la población.

El director de Inspección y Verificación Municipal, Adolfo García Dworak, informó que al realizar un operativo de vigilancia se detectó que en el establecimiento se realizaba un concierto en vivo, y al no contar con la anuencia de las autoridades municipales, se pidió a los asistentes que se encontraban en un centenar de vehículos que se retiraran del lugar.

Las autoridades municipales aplicaron una sanción económica al propietario y se procedió a colocar sellos de clausura al lugar.