La desaparición de fondos tan importantes para el desarrollo social e intelectual de Baja California sería sumamente irresponsable, apuntó el diputado federal Héctor Cruz, quien se posicionó en contra del proyecto para eliminar 109 fideicomisos federales de un plumazo.
Sin tomar en cuenta las conclusiones del parlamento abierto en donde expertos de cada tema -como protección civil, deportes, ciencia y academia-, expusieron el porque no se debieron desaparecer esos fideicomisos, decidieron pasar el proyecto sin atender a los expertos.
Cruz Aparicio, quien votó en contra del proyecto en lo general y en lo particular, lamentó que en lugar de intentar arreglar e incluso desaparecer aquellos fondos donde efectivamente haya corrupción, se opte por una medida draconiana y se deje en el limbo a científicos, deportistas, investigadores, defensores de los derechos humanos, estudiantes, víctimas de la violencia, entre otros.
“He decidido votar en contra en lo general estas reformas, porque hay una gran cerrazón para poder analizar con mayor detenimiento. Esperemos no encontrarnos en Baja California ante escenarios de desastres naturales porque ya no contaremos con el Fonden”, expuso.
Entre los más afectados se encuentra el Fondo para la Prevención de Desastres y el Fondo de Desastres, que suman 15 mil 566 millones 748 mil pesos, y que de desaparecer podría dejar al país en una condición muy vulnerable.
La situación presenta un panorama particularmente grave para el estado, pues al ubicarse en zona sísmica, necesitaría de recursos extraordinarios en caso de volver a afrontar un terremoto como el de 2010 o peor.
El diputado externalizó su preocupación por el destino de dichos recursos, pues en la reforma impulsada por la bancada de Morena no incluye un proyecto que reorganice la administración de los fondos y corren el riesgo de terminar mal utilizados en proyectos innecesarios.
A nivel local, la desaparición de los recursos significa poner en riesgo instituciones tan importantes como el Colegio de la Frontera Norte (Colef), que cuenta con un fondo de 62 millones 397 mil pesos para los estados en los que tiene presencia y que ha aportado enormemente al desarrollo de la comprensión social de Baja California.
Además, dejar en vulnerabilidad a defensores de derechos humanos y periodistas con la desaparición del fondo para su protección, los expondría como nunca a las mafias y a funcionarios corruptos, “un duro golpe a una sociedad ya de por sí golpeada por la violencia y la impunidad”, condenó Héctor Cruz.
“Personalmente no me opongo a que se revisen los fondos donde es verdad que han sido tradicionalmente centros de corrupción, y si tienen que desaparecer que desaparezcan; mi voto es en contra de un proyecto que de manera irresponsable desaparece fondos que actualmente cumplen una función muy importante en los rubros que fundamentan nuestra sociedad”, añadió.
Mientras, el Congreso de la Unión continúa discutiendo cada uno de los puntos de la reforma; el legislador tijuanense adelantó que mantendrá su posición en donde sea necesario.