Australia.- Los campos de Nueva Gales del Sur, en Australia, continúan llenos de ratones, en una plaga que ha dejado horrorizados a los granjeros y sus familias que día con día observan cómo estos animales recorren las cosechas de grano.
Un fenómeno meteorológico reciente conocido como ‘La Niña’ trajo fuertes lluvias a la costa este de Australia. Ello no solo ayudó a producir la cosecha de cereales más grande del país, sino que proporcionó abundante alimento a los roedores.
Los ratones se adaptan bien al clima, a menudo severo, del país. Pueden sobrevivir largos periodos de clima seco. Cuando cambia el clima, prosperan y se reproducen rápidamente. Medios locales informaron que solo un par de ratones puede producir en promedio hasta 500 crías en una temporada.
“Tiene un impacto enorme en tu salud mental. No duermo porque estoy paranoico, puedo escucharlos en las paredes y el techo”, dijo Kodi Brady, uno granjero que es víctima de la plaga.Durante últimos meses, Brady dedica sus mañanas para limpiar la plaga de ratones. Antes de irse a trabajar, recoge cientos de animales muertos que ha logrado ahogar en cubetas o envenenar, mientras la mayor plaga de roedores en décadas se extiende por el estado.